El autor explica a fray Felipe de los Rubielos la situación en la que se encuentra en relación con las revelaciones que le agitan, pues él lo único que desea es cumplir la voluntad del Señor.
Viva n Purisima Reyna de los Angeles
Carisimo P mio:
con toda reflexion e leido su apreciable car
ta de Vm y me parece que me asisten con bastante plenitud los
caracteres que Vm señala a de tener la verdadera revelazon
mas como a mi parecer el sor deja spre ciertas dudas, en
la execucion de sus soberanos designios, y el alma no desea
otra cosa que acertar con lo que quiere, se umilla y desaze
en su adorable presencia: esto mismo es lo que a mi me pasa
porque aunque me parece aver visto claro ser la volun
tad del sor este ayuno con todo son sus medios tan industrio
sos que quiere la cosa y esconde el poder; asi a sucedido
en otras operaciones especialmte en la de el acha: si no
se padecieren estos apuros y la naturaleza no diese mo
tivo para senterlos me parece no veria de aquel me
rito que el sor saca de sus divinas obras: por consiguien
te dire a Vm lo que me ocurre: hayer tarde en la
oracion nuevamente fui favorecido del sor y reflexio
nando la obra grandisima de esta nueva venida. presen
taronseme a la ymajinacion las grandes maravillas qe
el señor y su Sma madre hicieron en ejipto, y como
sacavan los demonios de los cuerpos de muchos, y destru
yendo los ydolos los que estavan ellos los arrojavan al
profundo del infierno; a esto se me dio noticia de la rara
e inponderable y asombrosa marabilla de la nueva
obra del sor que como entonzes no seran lanzados en
el infierno, si es que reconozida la criatura de la pose
sion que tiene el enemigo, no sera lanzado sino qui
tandole el dominio albosoluto que tiene, quedara
dentro del mismo cuerpo, para purificar a la cria
tura, inclinandola a la execucion de las buenas