El autor cuenta las últimas novedades a su prometida Lucrecia de León y le pide que le diga el nombre de la hija que han tenido. También le da diferentes indicaciones para que se puedan comunicar aunque estén los dos presos.
Lucrecia mia, o mi doña Juana
que no se qual nombre d estos
sea el tuyo, mill vezes en ora buena gozes la hija que Dios ha
sido servido de darte con tan prospero sucesso como has tenido
y espero en lo demas tendras, del nombre d ella, si es posible me a
visa y de tu salud que la que te ha faltado me ha dado infinita
pena, yo la he tenido y tengo a Dios gracias, no sin mucho tra
bajo y desabrimiento por no aver tenido nuevas de ti hasta el
dia de pascua dizenme que los señores inquisidores lo han
hecho muy bien contigo y que fueron los padrinos todo me da
mayor desseo de preguntarte el como y en que y de ver a mi hija
con quien sin duda alguna creo estaras contentisimas a la senora