El autor avisa a su mujer sobre su intención de no darle poder alguno y se congratula de su buen oficio.
Madrid 18 de Agto de 1801
Querida Franca Quanto me oigas de Castillo
y sus picardias son un confirmativo de su
hombria de bien, no te fatigues pr mi poder
qe no lo tendras nunca; solo procura tratar
bien a Castillo como home qe te interesa para
tu bien y descuida de mi, ps estoy andando to
dos los correos quando me dices estas llena
pesos fuertes mejicanos. Ningun bribon ha
parecido a ver a su Gefe, groseria qe es de
estrañar pro en desquite he formado pro
cesos a muchos, y el Rey mi amo los des-
tinara a Ceuta con buena racion
Estoy con mi empleo mas