El autor pide a Raimundo de Sobremonte que actúe como curador de Diego Hurtado para lograr la licencia que éste necesita para embarcarse hacia América.
Mi mas estimado Amo y sor
aier me manifesto dn Diego
de Mendoza qe ya no tenia se
guridad de biage con el Amo
que havia ofrecido llebarlo,
pero me añadio qe Nro Juez
Behedor le proporcionaria
pasage si Yo le facilitaba la
lizencia: con deseo de hazer este
obsequio a vmd, y al pobre Ynte
resado hable hoy a un Presidte
sre el asumpto, pero no halla
medio de eludir la Ley de Yn
dias que nos prohibe dejar
