Valladolid
29 de Marzo de 1826.
Sr D Felipe Mazarrasa.
Apreciable amigo mio: Me parece que
es llegado el caso de que el Ayunta-
miento a beneficio del Procomunado,
y mirando por la tranquilidad y
seguridad de la capital y su Probin-
cia, elève a los Pies del trono la
representacion consavida. El dos de
Abril proximo se da cúrso aqui á
la mia. Entiendo que oficialmente va
bien; pero privadamente no tan bien
Es necesario pues poner la cosa en
disposicion que arriba no puedan
desentenderse de la parte oficial...
Con esta fecha escrivo al Sr Obispo
lo que indico a su Ylma descifra
lo que aqui falta, asi como lo que
aqui indico pone en claro alguna
oscuridad que se notará en mi
carta al Sr Obispo. Combiene ya
que háble el Ayuntamiento y, como
es facil inferir, que háble breve
y brevemente. El tema debera ser
conciso y energico. El Gobierno y
ninguno tanto como el Gobierno
sabe por los antecedentes que de
dos años a esta parte obran en las
secretarias de Gracia y Justicia y de
Guerra hasta donde llega el numero
y la intensidad de los elementos re-
bolucionarios que encierra Santan-
der: El Gobierno tubo los primeros an-
tecedentes cuatro meses antes del
suceso de Tarifa; se le han repetido
despues aca varias veces, y San-
tander ha resultado tambien in-
dicado, y fuertemente indicado, en el
de la costa de Valencia. Es claro que
para que haya sospechas repetidas so-
bre Santander que Santander ha de
tener gentes dentro de Si que den
lugar a ellas con su conducta anterior
y posterior á la Restauracion. Cuales pues
seran estàs? Quienes seran los que han
alarmado al Gobierno baxo diversos Mi
nisterios y en tan diversas epocas y circuns
tancias? Seran los eclesiasticos Regulares
los Seculares, los Voluntarios Realistas, ó
media docena de empleados forasteros en
el Pais y sin enlaces ó conexiones en él?
... Los que han motivado estas alarmas
al Gobierno son los mismos que detestan
en su corazon al Gobernador de Santander
Autoridades rebolucionarias; fieros perseguidores
de los amantes del Rey en el tiempo de la
rebelion; Milicianos llamados nacionales;
yndividuos de Sociedades Jacobinas;
hombres inmorales ligados con vinculos
de amistad ó interes con semejantes
monstruos estos son los enemigos
encarnizados de Gonzalez Moreno, y
estos los que cuidan en Santander
de mantener el fuego de la rebelion
que transpirando de cuando en cuando
sobresaltan al Gobierno e e
Tal es mi querido amigo, al poco
mas ó menos, el punto de que, en
dictamen mio, debera partir la
exposicion al Soberano que se-
ria combeniente remitir pronto
a Madrid, y (esto me parece impo-
sible) con el mas profundo se-
creto. En fin, U medite la cosa
y practiqué en ella las variaciones que
le prescrivan las circunstancias por-
que no seria dificil que Yo me alu-
cinase en negocio que me toca
tan de cerca, y el cual no he desarrol-
lado completamente por no per-
mitirmelo la suma debilidad en
que me encuentro.
Tenga U la bondad de dar memorias
mias à su Señor hermano y U man-
de como guste a su atento servi-
dor que b sus M
Vicente Gonzalez Moreno
PD
la contextacion por conducto de ese Sr
Administrador de Correos