La autora recuerda a su hijo, Salvador Caramany y Fontdevila, que ella no tiene la obligación de asistirlo en Francia, sino sólo en España.
querido Hijo: es conocido error
averiguar las pretenciones de casa
caramany en Tolosa, ni en perpiñan
siendome cierto el estado, y lugar
en q los dexó tu Padre; como essos
passos q ideas son inutiles, recuerdo
me q la concordia solo me obliga a
asistirte en españa, y q me falta valor
para cansar al sujeto q en otra ocasion
me favorecio, viendole desabrido del
desaire con q le sonrogaste; por lo q
con dolor de no poderte complacer en
francia sera preciso haga deposito
de las mensuales cantidades, si ya no es
q las tomes en figueras porque te bas-
tara ser este mi dictamen para hazer
tu lo contrario
Deseo q Dios te illumine y gde ms as
como le suplico Gerona y julio 11 de
1769
Tu madre q de cora-
zon te quiere
de caramany y fontdevila
querido Hijo