El autor informa a doña Teresa Doncel sobre los pormenores de la familia Millet. Confirma la sospecha de la sangre mulata y relata cómo la propia familia Millet trató de ocultar esa información.
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un atentado cometido, sin pasar la consideracion, has-
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ta ahora que lo repiten con pelos y señales: Es el
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caso que uno de la Parentela de Millet ocurrio
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a la Parroquia de Sta Maria de esta Ciudad, pidien
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do la Partida de la Gonzalez, o su Padre, y visto estam
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pado en ella su defecto, pidio al Teniente cura
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le sacase otro Libro, y en el corto intermedio qe lo
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hizo, el tal Pariente bolco el Tintero en dha Par-
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tida; por lo que el Teniente Cura (a qn conoci, que era
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un Varon justo) se enfado y lamio con su propia Len-
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gua la tinta, de forma que dicen, que se entiende,
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y a mayor abundamiento le puso su nota: Ya
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ve vm que esto es un fuerte testigo, que no solo
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lo hablan las gentes de razon, sino hasta los Mu
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chachos de la Calle: Ademas de esto consta
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