Andrés Fernández avisa a Manuel López de que ha remitido las facturas que le ha mandado, excepto una que no ha podido entregar en persona debido a su salud y a la estrecha vigilancia a la que se encuentra sometido por parte de la policía. Le informa también de los últimos movimientos de las tropas en Salamanca, Cataluña y Vizcaya.
Amigo mio: recibo tu ultima con atraso, segun dice
el portador, y la contesto en el acto de recibirla, diciendote: Que
las facturas qe me han llegado las he remitido puntualmente á
su destino, lo mismo que he hecho con las qe me han llegado pa
pasarlas á ese negociante; pero qe existe en mi poder una, qe
no sabia como ni à quien la habia de encaminar, y creo qe
sea pr la qe preguntas. No dexé de reconocer que debia en-
tregarla personalmente por lo mismo qe no venia pa sugeto
conocido; pero, esto mismo aumentaba tambien la dificultad en
razon de no saber à quien dirigirme. Por otra parte, mi salud y
particulares circunstancias no me han permitido salir de mi casa
para aquel punto, donde hace cinco años que no estoy, ni podria
ir sin riesgo y contingencias, las qe seria largo referir. Cuando
te ofreci encargarme de tus negocios fue dentro de la esfera de
mi posibilidad; y no podia ser otra cosa. Siento en el alma que
hayan experimentado algun atraso ó desconcierto; pero, no ha es-
tado en mi mano evitarlo, ni hacer otra cosa. Si me indicases
el sugeto a quien habia de enviar la factura qe para en mi poder,
la remitiria, y haria llegase a sus manos; y creo que aun serviria
y produciria efecto. Bien quisiera describirte mi situacion para
convencerte de qe no he podido dexar un instante mi casa ni separar-
me de aqui; pero esto seria muy largo. Sin embargo no puedo
omitir el insinuarte qe por una rara casualidad supe con toda