La autora pide a Gaspar Suárez de la Puente que vele por sus padres mientras ella está en el convento.
mi ceñor
ya se a qunpildo su boluntad de vm y estoy
por ella en esta carcel q anq fuera mas
estrecha de no faltarla no me
lo pareciera solo mis paders ten
go su pena tan atarbesada el coraçon
q casi no beo ya de llorar por amor
de dyos q vm les etebrche perçonas q los
cosuelen q bien lo abra menester es
tos negosios no baya deespasio porq
entyendo q ten de caer mala çegun
estoy y de grasias a dyos q todas le qi
erere en esta casa y açen en su probecho y
gusto con esto adyos q no puedo abrir
los ojos de dolor