Revdo Padre P C Con la venida del muy Revdo P Provincial que fue el miércoles por la
tarde, dia 23 d este mes de febrero, tuve notiçia de su buelta a Palermo, que
me causo aquel regocijo, que V Ra puede juzgar, y especialmente, porque con
esta su venida bolberá la mia, y suya madre Teresa otra vez al Convento,
lo que sera de grandisima gloria de Dios; las cosas del P Provincial, por lo
que puedo entender en Napoles van muy bien, porque aquellos se muestran
muy oprimidos, y el P Provincial es amado de todos, yo me alegro por lo que
resulta a gloria de Dios, sin alegrarme del mal de otros. en quanto a mi, Padre
mio, le doy notiçia, como he estado doce treze dias, o mas por estas playas durmiendo
en el suelo, y comiendo biscocho, y lo que mas me afligia era un vehemente, y mucho
deseo de ver a Sor Teresa mi madre, ni otra oraçion por lo mas haçia, que suspirar su
presençia con mucho provecho pero de mi alma; Tambien he tenido en este viaje
alguna cariçia extraordinaria, como he significado a la madre, a quien escribo
la adjunta, y he dexado abierta en caso que V Ra la quiera leer; lo que principalmte
le encomiendo es, que ruegue a Dios, para que se sirva de ençender mayormente el
coraçon de la madre Sor Teresa para conmigo; porque Dios en este largo viaje
me ha dado a conoçer, quanto se dé por amado, y servido de que nos platiquemos
con ella; Yo muero de deseo por ella, porque se de cierto, que en su coraçon,
como en el de otra Santa Geltruda, habita nuestro bien. Creo que V Ra no
dexara de haçerlo, y tambien le suplico, ruegue a Dios por el aumento de mi espiritu,
que de Napoles le pide su bendiçion Febrero 25 de 1695. de V Ra. Su amado
hijo en JesuChristo. Fray Apolonio de la Natividad del Señor
Mucho le saluda el P suprior; Padre mio le dixe, que no me alegro del mal de otros,
a que añado, que tambien quiero tiernamente aquellos Padres, y espero en Dios
que todos concordemente haran quanto sea de la gloria de Dios; las cosas pareçe
que se vayan disponiendo muy bien; me quiera por amor de mi madre.