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Maarten Janssen, 2014-

PS8075

1800. Carta de Juan Ximénez Llamas, presbítero de la villa de Belmonte, y Francisco Villalón para Juan Manuel de Alcantud, franciscano descalzo.

ResumoEl autor avisa a Juan Manuel de Alcantud de que las palabras que su destinatario le transmite sirven para que cada día tenga más fe en esa obra, en la que quiere seguir trabajando a pesar de las dificultades. Le informa de que en breve recibirá otra carta de él junto con una de “N” (la beata Isabel). También da cuenta de que en los últimos tiempos muchas más personas se han acercado a ver a la beata, incluso en otras zonas, manifestando de formas muy llamativas su fervor por ella y aumentan las confesiones y la asistencia a las misas. Al final se añaden unas palabras del segundo remitente.
Autor(es) Juan Ximénez Llamas Francisco Villalón
Destinatário(s) Juan Manuel de Alcantud            
De España, Cuenca, Villar del Águila
Para España, Cuenca
Contexto

El proceso se abrió por alumbrados contra María Isabel Herráiz, la beata de Villar del Águila, entre 1802 y 1808. Se trata de un amplio proceso en el que se incluye a muchas otras personas que tienen relación con ella y se les acusa de ser cómplices en las ilusiones de María Isabel Herráiz. Ella creía que Jesucristo se encontraba en ella, por lo que no podía comulgar, incluso algunos otros acusados afirmaban que veían a Jesús hecho Niño en el pecho de la acusada. Cuando ella abjuró reconoció los errores que había declarado, errores que se debían al mal espíritu que había sido el causante de todas las señales que ella había recibido, las revelaciones, visiones que ella había creído que eran verdaderas y enviadas por Dios. Lo mismo ocurría con la creencia que María Isabel Herráiz tenía de que el Señor se había colocado en su pecho y que se había consagrado en su cuerpo para efectuar una reforma general en el mundo por su ministerio y para el establecimiento de un nuevo Apostolado y que había de morir en Roma y su cuerpo subir a los cielos al tercer día, hechos que estaban anunciados en el Apocalipsis y otros libros sagrados. María Isabel Herráiz alegaba que todos estos pensamientos los había tenido por culpa del demonio, quien había transformado y acalorado su imaginación, ofuscado su entendimiento, entorpecido su razón para no descubrir el engaño. Justificaba que sus cómplices fueron buscados e inducidos por ella. En su declaración alegó que no pactó con el diablo sino que fue él el que la poseyó. Asimismo, reconoció que permitió la adoración de la que fue objeto, pero todo fueron artificios diabólicos. Los alborotos que se dieron en su pueblo tampoco fueron culpa suya, puesto que algunas personas creyeron en ella pero todo fue obra del diablo porque esas personas estaban en mal estado. Parece que hubo alborotos y excesos por parte de los "endiablados" o creyentes en la Beata Isabel. En la parte superior del folio 26r un anotador ha escrito: "De Llamas a Alcantud" y "junio 6 de 800". En el folio 27r también se anota: "de Francisco Villalón a Alcantud".

Suporte un folio de papel doblado de manera irregular, escrito por la primera y la tercera cara.
Arquivo Archivo Diocesano de Cuenca
Repository Inquisición
Fundo Procesos de delitos
Cota arquivística Legajos 642-643, Expediente 7825
Fólios Pieza 20, 26r-27r
Transcrição Laura Martínez Martín
Revisão principal Gael Vaamonde
Contextualização Laura Martínez Martín
Modernização Gael Vaamonde
Data da transcrição2014

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Ave Maria Purissima

Mi Mas querido, y estimado P Lector: Recibi ayer la de Vm con sumo gusto, y Complacencia, y me ha llenado de singular gozo: Quedo enterado de quanto Vm dize en ella, y me sirve muchisimo para avivar cada dia mas la fe de esta obra del Sr, conozco lo mismo qe Vm me dize, que quiere el Sr qe trabajemos en ella, y nos esforzemos a pesar de quanto el enemigo procura machinar para apartarnos de ella: Yo he tenido bastante qe trabajar, y no han faltado apurillos, pero el Sr ha acudido a la mayor Necesidad, qe Jamas desampara a quien se pone sin reserva en sus manos. El Domingo recibiria Vm una mia con otra de N. en la qe dezia a Vm el estado, en qe se hallaba ea Como tambien el parecer del P Rubielos. Lo que ocurre aora de mas particular es la nocion general, y deseos de muchissas almas del pueblo, que han venido estos dias desde el primer dia de Pasqua a ver a N., y a que les diga cosas buenas, assi se explican, con unos mobimientos, y deseos tan buenos, qe bien claro dan a entender ser todo efec-to del Sr, qe atrae a si a estas pobres almas, qe han estado tanto tiempo sin conozer el tesoro, qe tienen dentro de su mismo pueblo, lloran las pobres, gimen suspiran, se postran, y hazen otras muchas cosas, sin qe nadie sea capaz de contenerlas, y esto no solamte en casa quando vienen a verla, sino tambien en la calle, esperandola o bien al salir de la Yglesia, o en las casas por donde ha de passar, esta mañana mismo adverti al salir de la Yglesia muchas gentes, qe se quedaban, y para que? esperando qe saliesse, y en el atrio alli fue ella! Ahora quisiera a Vm aqui: Vamos a los efectos: Confesiones generales ,qe no se como tengo de acudir a todas, mas frequencia de sacramentos tanto qe me veo aburrido los dias de fiesta, y estos dias mucha mas gente a las Missas, y al Rosario: todas que quieren ser buenas, qe no pueden parar si no vienen a verla ea. Otras le piden perdon, si hasta aqui havian hablado alguna cosa, o tenidola por una cosa regular ea En fin era necessario mucho para contarlo, y escrivirlo todo. Ayer estuvimos en Huerta, y por conozida voluntad del Sr fue tambien, alli lo mismo, qe abrazos! que gimo-teos! Que salir hasta fuera del lugar a acompañarla! Por ultimo me parece qe esto es una prueba clara, y patente de esta obra de amor del Sr

Vamos a otra cosa. Se puso el tabernaculo: Que cosa tan famosa! como campea aora mas la Sra! tengo deseo de qe Vm la vea. Vm havra estrañado, qe en mi anterior nada dezia de esto, y Vizente qe vino el ultimo dia de Pasqua a la obra del Retablo de Huerta, me ha dicho ha escrito a Vm y me pregunto si havia tocado a Vm algo de lo dicho: Aora lo hago, dando a Vm las grazias, y a quien dado la limosna para obra tan buena. No estrañe Vm el que no tocasse nada de esto en mi anterior, se llevo toda la atencion lo qe en ella dezia de los apuros de N. ea.

N. no puede escrivir, pues esta mañana haze ya cinco horas que esta en la cama totalmte enagenada, efectos del amor del Sr, y me dize qe en punto de los apuros qe a Vm escrivio qe esta lo mismo, pareciendole qe no sucedera cosa alguna de quantas tiene dichas, y con un continuo ay de lo mal qe trata al Sr, qe en el fixo no se trastorna siquiera un instante: qe Algunos dias se pone mui mala dando a entender el Sr lo indignado qe esta con tanta desolacion, y mala correspondencia, y detiene la justicia como que parece esta repiso de haver empeñado la palabra: assi lo ha manifestado tambien el Sr a la Ygnacia, diziendole qe todo se compondra por este medio ea.

No tengo lugar para mas. exps afects de Franco, y de los de casa y de la Ezequiela, qe ha venido con su padre, y se halla en casa. No dudo me encomendara mucho al Sr, al qe pido, y a su Purissima Me le gue en su SSma gracia

Villar del Aga y Junio 6 de 1800. Afectmo Amigo de Vm Juan Ximenez Llamas

N. qe le escriba Vm

Mi estimado Padre Lector; no se me olvida la de Vmd, y le suplico me diga cuanto halle por comeniente, pues no quiero hazer mas qe lo qe sea del agrado de Nuestra Purima Madre, ya ve Vmd lo qe dize este señor cura, sin decir nada pues es imposible esplicar todas estas cosas, sea el señor vendito, y Alabado por todo. muchisima gana tengo de qe Vmd venga por aca, para qe vea a Nuestra Purisima pues esta aora qe echa el resto, si Vmd la viera! ea qe aora quisiera qe tambien la viera el P Mro a ver si una Niña.

de Vmd Franco Villalon

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