El autor comenta a Felipe Mazarrasa y Cobo su estado de fatiga por el calor y le pide que dé un recado.
mi costumbre, y he sido oido.
Amigo mio: Ya no pue-
do tener la pluma en la
mano. No déxe U de escri-
birme. Yo por mi parte
aprovecharé los momentos
en que me sienta con
algun vigor para partici-
par a U algo de lo mucho
que me queda por decir
En el interin U dispon--ga